martes, agosto 09, 2005

Colorin Colorado


Estoy harto de los finales alegres. No soy psicologo pero supongo que el origen de todos (o gran parte al menos) de los malos rollos (terminó científico) es la continua decepción que la realidad nos genera. En el mundo de la ficción desde el principio sabemos que al final se casan, que vuelven, que ganan los buenos, que regresa sano y salvo, puede ser que pasen mil penalidades, que discutan, que estallen bombas y caigan rayos, pero al final todo irá bien. Y la televisión y el cine nos hacen ese mundo de ficción tan cotidiano y tan intimo que claro, la realidad luego es un fiasco. Todos sabemos que la caja tonta es nuestra ventana al mundo. Supongo que todos nos hemos sentido identificados con algún personaje de una serie o de una peli, e incluso lo que les sucede puede parecerse a algo nuestro. La diferencia es que a ellos siempre les va a ir bien. ¿O no?

En nuestro mundo, aun cuando la vida te va sobre ruedas, puede ser que en cualquier momento estés jodido. Esta parrafada viene un poco a colación de mi blog anterior, cuando dije que cambiaría el final es porque no me parecía ni real ni justo, ideal si, y me gustaría que me pasara dado el caso, pero siendo realista es lo menos probable.

A todo esto os voy a descubrir un secreto, la magia de los finales esta en saber poner el punto final en el momento oportuno... Colorín colorado.